(Mérida, Yucatán 15 de julio de 1925-México DF a 5 de marzo de 1979)
Dramaturgo, ensayista, narrador y poeta. Estudió derecho en la UNAM. Durante su época de universitario hizo migas con: Ernesto Cardenal, Ernesto Mejía Sanchez, Tito Monterroso, Rosario Castellanos, Lolita Castro, entre otras personas. Becado por el Gobierno de Francia, se especializó en la Facultad de Letras y en la Escuela de Profesores de Francés para el Extranjero en la Universidad de La Sorbona.
Ernesto Cardenal comenta sobre la homosexualidad de Wilberto: «Cuando regresamos a la ciudad de México me dieron la noticia de que Meche me había -más o menos- cambiado por Wilberto Cantón. Noticia tal vez distorsionada […] En mi cólera le dije que él era homosexual. Ella me dijo que a todo aquel que yo consideraba que podía ser mi rival le llamaba homosexual. La verdad es que él tenía unos modales delicados y una delicada tez de porcelana […] Pobre Wilberto Cantón que siendo ya famoso en teatro murió bastante prematuramente de un ataque de corazón. Para entonces ya era abiertamente homosexual junto con muchos otros de su gente de teatro. »
Fue jefe de información y director del Departamento Editorial en la UNAM; subdirector de la Escuela de Teatro, jefe de Prensa y Relaciones Públicas, jefe de Difusión y jefe de los departamentos de Teatro y Literatura del INBA; director del programa de televisión “La Hora de Bellas Artes”; fundador, con Luis Echeverría, de México y la Universidad; director de Cuadernos de Bellas Artes.
Entre 1945 y 1970 puso en escena: Saber morir, Escuela de cortesanos, Pecado mortal, Tan cerca del cielo, Murió por la patria y Unas migajas de felicidad. Colaboró en Espiga, México y la Universidad, Cuadernos de Bellas Artes, Excélsior, Novedades y El Nacional. Premio Juan Ruiz de Alarcón, 1963, por Nosotros somos Dios. Premio del Primer Festival de Teatro Latino y de la Asociación de Críticos Latinos en Nueva York, 1970, por Los malditos. Medalla Yucatán, 1971, por su trayectoria literaria. Premio del I Concurso de Teatro Nacional de Cultura de los Trabajadores, 1979, por Retrato de mi padre. Premio Nacional de Teatro Mexicali, 1979, por La República.
Es sabido que el presidente le negó la posibilidad de dirigir Bellas Artes: «No Wilberto Cantón no, el nunca será director de Bellas Artes porque es homosexual». Wilberto había aprendido la dignidad de Novo, con sus anillos, sus joterías