(Teziutlan, Puebla 10 de julio- 7 de julio del 2013)
Cuando era muy joven, aún adolescente, Alejandro, luego Dayana renegó de su naturaleza homosexual para tratar, quizás, de encajar en una sociedad que juzga lo diferente sólo por serlo. Sin embargo terminó aceptándose y en su familia encontró el cobijo, la comprensión y el amor necesarios para ser quien era. Su orientación sexual y su travestismo nunca fueron un secreto.
Era el mayor de dos hermanos y una hermana: el primogénito. Trabajaba en una maquila y tenía planes de arreglar la casa materna, donde vivía y donde siempre lo llamaron como varón, aun cuando ante la incrédula mirada de su familia se transformaba en la guapa Dayana.
Dayana era delgada, de piel apiñonada, rostro afilado, ojos grandes y sonrisa amplia. Esas cualidades la llevaron a obtener el título de Nuestra Belleza Gay Teziutlán 2008.
Con la intención de procurar un cuerpo acorde con sus rasgos femeninos, frecuentemente ingería hormonas y continuaba el tratamiento en tanto pudiera costearlas. En alguna ocasión se inyectó aceite comestible para rellenar la piel de sus pechos, lo que le ocasionó una infección y la obligó a usar “truco” en el sostén. De haber tenido el dinero, sin dudarlo habría modificado su físico para ser por fuera, la misma que era por dentro. Pero nunca tuvo.
Dayana fue mutilada y su cuerpo partido a la mitad, su cuerpo fue identificado por su hermana. De acuerdo con las necropsias de ley, Dayana de 29 años murió desangrada que en términos médicos se define como shock hipovulémico. Los hechos se investigan en carpeta de investigación 666/2013/Teziutlán.
Dicen que era de las mejores travestis de la zona, de las más guapas. Le gustaba hacer show imitando a Thalía, Ana Bárbara, Mónica Naranjo y Marisela. Y a veces, dicen, también se dedicaba al sexoservicio.
Dayana encontró la muerte en algún momento entre las primeras horas del sábado y las primeras del lunes 8 de julio, un día después de las elecciones que fueron reportadas “en calma”.
Versiones periodísticas aseguran que el sobrino del dueño del edificio donde la encontraron le confesó a éste el crimen antes de fugarse.
Varias personas vieron a la mamá de Dayana buscándola aquí y allá. Pero fue hasta el martes cuando alguien le preguntó si había oído las noticias. No fue ella quien reconoció el cuerpo. En un acto de compasión le impidieron verlo.
Entre la comunidad de la diversidad sexual corre el rumor de que el asesino ni siquiera ha salido de Teziutlán, que su apellido es de familia pudiente, de esas que pueden comprar inmunidad. Pero sobre todo corre el miedo, un temor fundado, a que pase de nuevo lo que no había pasado nunca. Todavía hay quienes creen que en cualquier momento verán a Dayana caminando por la calle. No entienden lo que pasó, no hay manera de nombrarlo, no conocen las palabras que definen un crimen cuando es tan atroz.
Dayana fue velada el miércoles 10 de julio, día de su cumpleaños.
Su nombre para efectos legales era Alejandro Mónico Hernández.
Foto y texto de Mely Arellano. Se agradece a Tuss Fernandez, el posteo de Reversible.
http://e-consulta.com/…/identifican-al-presunto-asesino-del…
http://ladobe.com.mx/…/se-registraron-9-crimenes-de-odio-e…/
http://ladobe.com.mx/…/un-crimen-de-odio-que-arrastra-miedo/